Budapest (20 y 21 de junio de 2011)

Nos levantamos temprano, quejándonos de por qué habíamos elegido un bus a las 7 de la mañana para ir de Viena a Budapest. Sin embargo horas más tarde estaríamos agradecidos de haberlo hecho, aprovechando las horas de la mañana para comenzar a recorrer la ciudad. En un bus de clase ejecutiva, con enchufes y wifi en ambos países, aprovechamos para dormir. Como dato curioso, el ticket puede comprarse tanto por la página austriaca como por la húngara. La diferencia, un incremento casi del cien por ciento, por el mismo recorrido de unos 350 kms, es decir, unos 11 euros que pagamos contra unos casi 20, otro indicio de que nada cuesta lo que vale. Llegamos a la terminal de ómnibus de Budapest a eso de las 10 de la mañana y advertí a Mariana, que tenga cuidado, ya que no estábamos más en el dietético primer mundo. Comentario cómico después de todo, ya que el distraído fui yo, y terminaría sin celular la noche siguiente, por considerar al hostel zona neutral dejándolo sin cuidado por 10 minutos mientras se cargaba. De todas formas sigo considerando al hecho como una falta mía y no voy a quejarme del pueblo húngaro. Una… Seguir leyendo